Queso procedente de la villa de Gorgonzola, cerca de Milán. Estamos ante uno de los quesos azules más famosos de Europa junto con el Roquefort, el Cabrales o el Stilton. En este caso existen dos tipos de Gorgonzola, el dulce (que es el que nosotros ofrecemos) y el picante. Su existencia se documenta ya desde la Edad Media y es un ingrediente fundamental de muchos platos típicos italianos. Desde 1996 disfruta de DOP. Es uno de los quesos italianos más antiguos. Algunos piensan que su origen se encuentra en la localidad del mismo nombre a las puertas de Milán ya en el año 879. Otros sitúan su origen en Pasturo (Valsassina). Sin duda alguna, sea cual sea su origen, estamos ante un queso antiguo y enraizado en la más sólida tradición quesera europea.
El Gorgonzola dulce se cura durante un período de 50 días y, durante ese proceso, se le añade el hongo penicillium roqueforti y penicillium glaucum que le darán su aspecto característico.
Estamos ante un queso muy cremoso, de sabor intenso y ligeramente picante. Es mucho menos aromático que sus primos europeos, resultando más fácil su asociación con otros alimentos. De cualquier manera, como con todos los quesos azules, hay que tener cuidado con el orden de consumo ya que su personalidad puede anular la de otros alimentos.
Recomendamos su consumo directo, especialmente a los amantes de los quesos intensos, acompañando de vinos tintos como los que ofrecen las mencías del Bierzo, por ejemplo, Pétalos, o los potentes Toro, como un riquísimo Silbón.
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